Ahora es común escuchar hablar en Puerto Rico sobre la importancia de la transparencia y el acceso a la información como instrumento para la buena gobernanza. Mientras del dicho a hecho hay un gran trecho… para muestra un botón basta. Este verano quedó demostrado que el acceso a la información es una herramienta fundamental para la participación ciudadana y que sin ella, la ciudadanía no puede participar efectivamente, pero que armados con información, sin filtros, la gente se empodera, actúa y logra cambios cuando así hace falta.
Anualmente, el 28 de septiembre se celebra y se promueve el “Right to Know Day” o Día del Derecho a Saber. La celebración de este día nace en Sofía, Bulgaria en el año 2002 después de una conferencia sobre la Libertad de Información (FOI en sus siglas en inglés) donde participaron personas representando 15 países. En el 2015, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO en sus siglas en inglés) declaró mediante una resolución el día 28 de septiembre como “International Day for Universal Access to Information” o el Día Internacional de Acceso Universal a la Información.
Desde el 2014 Espacios Abiertos está trabajando por una sociedad abierta, transparente y participativa que sea más justa y equitativa para todas y todos en Puerto Rico. Ante la crisis económica, un área de énfasis de EA lo ha sido la transparencia fiscal y la importancia del derecho a saber sobre estos temas; fomentando la democratización de la información sobre la deuda con el Diccionario de la Deuda o la transparencia de la reestructuración con la publicación de varios estudios sobre la sostenibilidad de la deuda. Y en ocasiones hasta recurriendo a los tribunales para hacer valer el derecho de acceso a información que nos asiste a todos y todas logrando que el gobierno divulgara los supuestos económicos del Plan Fiscal y el informe sobre créditos, incentivos y concesiones tributarias, así como la traducción a español del Plan de Recuperación Post María para lograr que la mayoría del pueblo tuviera acceso a conocer y comentar el mismo. Cada paso nos acerca más a la meta, pero queda camino por andar.
Actualmente en Puerto Rico, las leyes aprobadas bajo el supuesto de fomentar el acceso a la información y la transparencia se quedan cortas de su propósito y el ente gubernamental las levanta como justificación para limitar, en vez de facilitar, el acceso. Esto impide la participación efectiva de la ciudadanía en las decisiones que nos afectan como país, limita la democracia y perpetúa la desigualdad.
En un mundo donde se generan cada día más datos que nos pueden permitir tomar decisiones mejor informadas, el derecho a saber no puede ser un privilegio de unos, sino derecho de todos. Celébralo hoy 28, pero exígelo todos los días.