Podemos detener el virus de la corrupción y salvar vidas, ahora, con acciones rápidas.
La ética, honestidad y transparencia no están reñidas con la urgencia que requieren los tiempos.
Se puede actuar con celeridad de forma limpia. Sin excusas.
Espacios Abiertos propone que se adopten las recomendaciones de Transparencia Internacional en cuanto a contrataciones públicas en momentos de emergencia.
Son cinco, los elementos mínimos que debe considerar el gobierno para asegurar la integridad en las compras y adjudicaciones. No hay que reinventar la rueda. El detalle se lo hemos comunicado a la Gobernadora y al Secretario de Salud. La bola está en su cancha.
1) Transparencia y datos abiertos – los recursos destinados a la emergencia deben ser informados en su totalidad, de forma continua, oportuna, veraz y verificable, y en lenguaje ciudadano.
2) Administración de los recursos- los recursos deben ser administrados bajo los principios de eficiencia, eficacia, economía, transparencia e imparcialidad, y deberán asegurar las mejores condiciones para el Estado.
3) Rendición de cuentas – del total de los recursos invertidos, las acciones realizadas, beneficiarios, contrataciones y evaluación de eficiencia de dichas contrataciones.
4) Garantía de competencia económica – evitar la concentración y acaparamiento de contratos por bienes y servicios para atender la emergencia. Asegurar participación de micro, pequeñas y medianas empresas. Asegurar libre concurrencia y libre competencia para evitar pagos con sobreprecios o especulación.
5) Seguimiento al gasto público – deben implementarse mecanismos de vigilancia adicionales a los que existen en las leyes y reglamentos para garantizar eficiencia e integridad en el uso de los recursos.