El dilema del taxista y la deuda
Imaginemos que Puerto Rico es un taxista. Ese taxista debe dinero y se encuentra ante un dilema: decidir entre entregar su taxi como signo de voluntad de pago a sus deudores o seguir usándolo, generar ingresos para su sustento y para pagar sus deudas. Si el taxista entrega su taxi, “cumple” momentáneamente con sus deudores pero no tendrá forma de generar dinero para vivir, ni podrá seguir pagando sus deudas. Si se queda con él, tendrá muchas más posibilidades y capacidad de generar dinero para cumplir a largo plazo con sus responsabilidades. Nadie querría prestarle dinero a alguien que no tiene capacidad de generar ingresos para repagarle.
Para que Puerto Rico pueda estar en condición de pagar su deuda, primero tiene que invertir sus recursos en recuperarse de sus crisis y procurar tener nuevamente desarrollo y crecimiento económico. Solo así podrá pagar sus deudas y acceder nuevamente a los mercados.
“Si la deuda no se reestructura de forma apropiada, no habrá ninguna nueva estrategia de crecimiento que pueda ser implementada”, señaló hoy Martín Guzmán, doctor en Economía, profesor e investigador de Columbia University, al presentar el estudio que realizó en coautoría con Joseph Stiglitz y Pablo Gluzmann, titulado Análisis de alivio de deuda que necesita Puerto Rico para restaurar su sostenibilidad.
Entonces ¿entregamos el taxi o seguimos con él?
Este no es tema solamente de técnicos y expertos. Promover que la discusión de la deuda solamente se dé entre expertos es abonar a la opacidad y falta de transparencia en lo público. Los ciudadanos tenemos derecho a participar en la discusión del futuro del país y procurar que con los recursos que tenemos, se atiendan primero nuestras prioridades.