Fueron muchos los trabajadores que, al radicar su planilla el 15 de abril, comentaban que esta vez “no les había sobrado nada”. En efecto, este año miles de familias vieron aumentada su obligación contributiva por la eliminación del crédito por trabajo. Este crédito, que estuvo vigente desde el 2007 y se eliminó para el año contributivo 2014, intentaba incentivar que las personas con ingresos bajos trabajaran en la economía formal.
En Puerto Rico, solo un 40.7% de la población trabaja en la economía formal. El sentido común nos indica que una de las prioridades del Gobierno debía ser aumentar esta cifra. Sin embargo, se continúa penalizando a las personas que trabajan. Son muchos quienes con un empleo formal no logran salir de la pobreza y, por consiguiente, prefieren mantenerse trabajando en la informalidad (“buscándoselas por el lado” o “chiripeando”).
El Código de Rentas Internas se utiliza (además de para allegar dinero al erario) como una manera de incentivar o aumentar conductas que el Gobierno estima buenas para nuestro país o la economía. Así, por ejemplo, se incentiva la compra de hogares a través de las deducciones de intereses hipotecarios.
Sin embargo, muchos de los créditos, deducciones y exenciones que hay actualmente no son lo suficientemente efectivos para ayudar a los trabajadores y trabajadoras. Además, existen muchos otros incentivos que proveen beneficios a personas, entidades o corporaciones que no se justifican, y muchísimos otros ni tan siquiera se evalúan para determinar si se deben mantener o eliminar. El Gobierno sigue ingresando menos recaudos de los que necesita pero mantiene cientos de incentivos que no le son de utilidad al país.
¿La suerte está echada?
Ayer, mientras se entregaban miles de planillas, los legisladores y el equipo del Gobernador estaban negociando los cambios a la propuesta “Reforma Contributiva”.
¿Tendremos un crédito por trabajo que incentive el empleo? ¿Tendremos unos créditos que alivien el aumento en los impuestos que pagarán los trabajadores pobres con un impuesto al consumo? ¿Se tomarán medidas para eliminar créditos y beneficios que redundan en menos dinero para el Gobierno y no son costo efectivos?
La suerte no está echada… Todavía hay tiempo para exigir que la Ley de Reforma Contributiva mejore la calidad de vida de los trabajadores, que incentive el trabajo y provea oportunidades reales para que estos salgan de la pobreza.
Si te quieres sumar al esfuerzo para lograr un Puerto Rico con mayor seguridad económica o fuiste uno de los contribuyentes que perdió el crédito por trabajo, lee nuestra propuesta para un crédito que incentive el trabajo para las personas que más lo necesiten o mira este resumen. Súmate al grupo de EA para mantenerte informado/a o escríbenos a info@espaciosabiertos.org. ¡Queremos conocer tu historia!